Se pueden encontrar pinturas, dibujos, esculturas, cerámicas, tapices, impresiones, fotografías, collages, así como bodegones, abstracciones, paisajes, desnudos, retratos, tal como especifica el sitio web, con precios, fechas y técnicas.

El Museo de Arte Latinoamericano de Los Angeles (Molaa), el único museo en Estados Unidos dedicado exclusivamente al arte contemporáneo de América Latina, cuya curadora en jefa es la argentina Gabriela Urtiaga, realiza por primera vez en su historia una subasta online, con 167 obras donadas -y firmadas por artistas nacionales como Rogelio Polesello, San Poggio, Dolores Casares, Luisa González y Julián Manzelli (Chu), entre otros- para afrontar la pérdida de ingresos generada por la pandemia.

Artistas, galeristas y coleccionistas de toda América donaron al museo, cerrado desde marzo, este conjunto de obras, un corpus ecléctico de los más diversos estilos, soportes, fechas y latitudes, para apoyar a esta institución «pionera en la difusión y la investigación del arte latino y latinoamericano no sólo en California sino en los Estados Unidos», señala en una entrevista con Télam Gabriela Urtiaga, curadora en jefa del Museo de Arte Latinoamericano, ubicado en Long Beach.

«Desde aquí tenemos la posibilidad maravillosa de generar una alternativa cultural muy necesaria, hoy quizá más que nunca, en un país donde la influencia de lo latino tiene cada vez más peso e influencia», asegura la excuradora del área de artes visuales del CCK.

En la plataforma invaluable.com/molaa se puede seguir día a día el detalle de la subasta -que concluye el próximo 19 de julio- en donde destacan también obras de los mexicanos Leonardo Nierman, José Luis Cuevas y Francisco Toledo; de los cubanos Manuel Mendive y Zaida del Rio; y del venezolano Luis Mille.

Se pueden encontrar pinturas, dibujos, esculturas, cerámicas, tapices, impresiones, fotografías, collages, así como bodegones, abstracciones, paisajes, desnudos, retratos, tal como especifica el sitio web, con precios, fechas, técnicas y más.

Una de las piezas que ha tenido más interesados hasta ahora es «Vuela», un pequeño y colorido panel realizado con pintura para autos del graffitero argentino Julián Manzelli (1975), más conocido como CHU y por sus murales de grandes dimensiones.

Los ingresos generados por la subasta irán a parar al Fondo de Recuperación Molaa Covid-19, así denominado para cubrir los gastos básicos de preservación de la colección y de las obras prestadas, así como también para implementar las medidas de seguridad necesarias y «asegurar que la institución perdure», según un comunicado del

«El generoso apoyo que los artistas y coleccionistas brindan a Molaa a través de sus donaciones para esta subasta on line es clave para que continuemos desarrollando y ejecutando nuestra misión», indicó Lourdes Ramos, presidenta y CEO del museo.

«Molaa representa una ventana de oportunidad y una plataforma de difusión muy potente para artistas latinoamericanos, especialmente en la ciudad de Los Ángeles donde la conexión latina es muy fuerte», asegura Urtiaga.

– T: ¿De qué manera afectó la pandemia al museo?
– Gabriela Urtiaga: Ha sido muy duro, como en todos lados. Nadie imaginaba algo así. Pero este mundo contemporáneo tan cambiante nos exige ser flexibles y resilientes y, si bien aquí en Estados Unidos el impacto económico ha sido muy profundo, desde el primer momento trabajamos mucho en minimizar las consecuencias de la pandemia y replantear un nuevo escenario que seguimos actualizando mientras la pandemia continúa evolucionando. Obviamente, nos vimos forzados a posponer las exhibiciones internacionales y demorar las aperturas planificadas para la primera mitad del año. Ese nuevo schedule por supuesto ha modificado también la programación planificada para 2021 y 2022.

– T: ¿Cómo nació la idea de la subasta?
– GU: Esta es la primera subasta completamente online que realiza el museo. Como antecedente, Molaa realiza una gran subasta durante la gala anual. A principios de abril, ya durante la pandemia, el coleccionista argentino Sammy Sayago, que reside hace muchos años aquí en California, donó parte de su colección para apoyar al museo en este tiempo difícil. Ha sido un gesto que agradecemos y valoramos mucho. Esta subasta se explica en el contexto que estamos viviendo. La idea inicial ha sido acercar esta propuesta a muchos coleccionistas de aquí y de toda latinoamérica, que puedan tener el interés y la voluntad de contribuir de manera directa con el museo. Y para los compradores, es también una gran oportunidad de adquirir obra de grandes maestros latinoamericanos y también de artistas de media carrera y emergentes.

– T: ¿Cómo crees que cambiará a futuro el panorama de exposiciones y actividades, especialmente los programas públicos y educativos?

– GU: Es la pregunta del millón. Es muy difícil saberlo en este momento pero está claro que el modelo y el desarrollo de las actividades de un museo ya cambiaron. Será de otra manera, de una forma más consciente y responsable para todos, para las instituciones pero también para el público. Habrá más tecnología y nuevos hábitos de interacción.

– T: ¿Cómo imaginas la reapertura del museo?
– GU: Inicialmente el plan era reabrir durante julio en plena temporada de verano aquí, pero lamentablemente estamos viviendo un escenario de repunte de Covid 19 que nos ha obligado a posponer la reapertura. Todavía no se ha definido, obviamente vamos a priorizar la seguridad del staff y de los visitantes. Mientras tanto, estamos trabajamos en la adaptación de todas las instalaciones a la nueva realidad. Las muestras más próximas ya debieron cambiar sus dispositivos. Para la reapertura, vamos a presentar una gran exposición que reúne obra de artistas mujeres que forman parte de la colección. Habrá más de cuarenta artistas, de veinte países latinoamericanos que, juntas, configuran un mapa posible definido por miradas que hoy cobran nuevos significados. La muestra se llamará «Herland». Por otra parte, el año próximo Molaa celebra sus primeros 25 años y lo hará de muy buena forma, con una colección permanente sólida y en crecimiento y una programación que busca calidad, diversidad, integración. El rol social del museo, como espacio de encuentro que democratiza el arte, comprometido con la comunidad, con programas educativos innovadores, hoy es clave y necesario.

El Museo de Arte Latinoamericano (Molaa) fue fundado en 1996 en Long Beach (California) y desde entonces ha duplicado su tamaño. Su colección permanente posee 1.600 obras de artistas como Rufino Tamayo, Carlos Cruz-Díez, Los Carpinteros, Liliana Porter, Carlos Alonso, Antonio Berni, Fernando Botero, Tania Bruguera, Leonora Carrington y Milagros de la Torre, entre muchos otros.

Las obras de la subasta para el Fondo de Recuperación Molaa Covid-19 se pueden encontrar en invaluable.com/molaa.

 

Fuente: Télam

 

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