“La arquitectura es el juego sabio, correcto y magnífico de los volúmenes reunidos bajo la luz.”
Le Corbusier
Sobre una cascara neutra, la utilización de recursos, tales como un uso adecuado y equilibrado de volúmenes, líneas puras y combinación amplia de texturas, hacen de este departamento un juego de sentidos.
Emplazado en un piso 17 y privilegiado por sus vistas de la costa santafesina, este departamento fue diseñado teniendo en cuenta cada detalle con estilo y personalidad.
Volúmenes y luminosidad hacen una combinación perfecta, las texturas ayudan a delimitar superficies, los cambios de materialidad y de color concretan y definen todos los espacios…
Los materiales fueron meticulosamente seleccionados, combinando maderas, superficies lisas brillantes y piedras, con una cáscara de colores neutros que aportan al espacio funcionalidad y elegancia. La continuidad en los colores y los materiales habla de un lenguaje racional pero con acentos de algunos elementos clásicos y sofisticados en el mobiliario y los detalles.
El uso de piedras naturales, ya sea granito negro Venus en acabado anticatto (en el caso de la cocina); y mármol marrón emperador (en el caso de los baños), marcan elementos de diseño y tendencia con un aire minimalista y elegante…
Una gama cromática neutra con presciencia de colores vivos en los detalles identifican cada sector.
El living comedor y su integración total con la cocina hablan de un espacio diáfano y funcional donde las visuales del exterior y la luminosidad aportan una gran cuota de serenidad.
Living, comedor y cocina comparten espacio y el mobiliaria es el que personaliza cada sector. Todo el mobiliario del departamento fue diseñado y realizado a medida, cuidando la vinculación de los materiales y la articulación de cada sector.
En la suite principal vinculada con un estar íntimo y con el vestidor y el baño, preside una cama con baldaquino en un diseño muy actual en combinación de madera cuero y lacas de alto brillo.
La madera también es un elemento importante en esta vivienda, pisos, mobiliario y revestimiento de muros, ya sea con mucho veta, como es el caso del zebrano utilizado o en acabados de lacas negra o naturales.
Las telas y alfombras aportan texturas y color, definen espacios y logran una gran cuota de calidez y confort.
Una cuota de color y estilo, un par de muebles realizados con pach de maderas recicladas dan un toque fresco.
Este tipo de decoración de aire minimalista requiere la menor cantidad de elementos posibles Se trata de lograr un balance entre lo esencial y la luz. Se mezclan pocos colores y siempre se da prioridad a los neutros; esto hace que los espacios se vean más amplios.
Tengamos en cuenta que minimalista no quiere decir inhabitado. El estilo minimalista, lejos de ser un estilo sin sentimientos, permite exprimir todos los matices de nuestra sensibilidad y de nuestra inspiración. El espacio y los objetos toman un significado especial. Es una decoración para amantes de la simplicidad, la serenidad, la elegancia y la sobriedad.
CREDITO y FOTOS: Gustavo Wedertz