Los festivales de cine significan para nuestro país una nueva pantalla para los realizadores, algo que para las películas chicas e independientes o aquellos que están arrancando a dar sus primeros pasos en la industria cinematográfica es difícil. Por esa razón, cada vez que se anuncia la creación de un festival es un motivo de celebración. En este caso, esa alegría se multiplica, ya que representa el anhelo de miles de estudiantes y egresados de la Carrera de Diseño en Imagen y Sonido de la Universidad de Buenos Aires, que arrancó en 1989, y recién este año tendrá su primer festival de cine.

El FIC.UBA está organizado por la Universidad de Buenos Aires a través de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) y la Carrera de Imagen y Sonido. El mismo estará dedicado a la temática Cine y Democracia y se llevará a cabo desde el 25 al 30 de julio.

“El festival es un viejo anhelo y deseo de la carrera de Diseño de Imagen y Sonido. Soy egresado y profesor de la carrera y recuerdo ir al BAFICI o al de Mar del Plata con amigos y compañeros y preguntarnos cuándo tendríamos nuestro propio festival de cine, por qué no hacíamos lo mismo. FIC.UBA es el resultado de varios años de trabajo, de lucha y esfuerzo, de un montón de docentes, estudiantes que vienen militando esta idea hace muchos años y la afortunada visión y generosidad de esta nueva gestión, del rector Ricardo Gelpi, del vice Emiliano Yacobitti, del decano y sus secretarios en la FADU que hicieron todo lo que tenían a su alcance para que se pudiera realizar. Este festival además nos va a permitir abrir un proceso de liderazgo y discusión en la región para empezar a pensar medidas, tomar partido, presentar ideas y aportar a la discusión y las soluciones para la industria audiovisual en su conjunto”, comentó Ricardo Alfonsín, Director General del festival.

En el marco de las celebraciones por los 40 años de democracia ininterrumpida en nuestro país, este Festival tiene como objetivo promover el arraigo de los valores del sistema democrático. “Siempre digo que el cine no es quizás la herramienta de transformación que este mundo tan injusto necesita, pero sin duda puede inspirar y motivar a aquellos que desde cargos, quizás más ejecutivos, sí tienen la responsabilidad de generar las transformaciones que necesitamos, es una fuente de inspección permanente, puede reflejar y dar a conocer problemáticas que estaban ocultas y dar luz. Después de 40 años, poder hacer un repaso por todo el aporte que hizo el audiovisual a la consolidación de la democracia nos parecía muy importante. Creo que el festival es una enorme oportunidad para mostrar además el compromiso con los valores democráticos que se reflejan en la formación de cada una de nuestras aulas”, remarcó Alfonsín.

Durante el festival, se exhibirán más de medio centenar de películas, entre la competencia internacional de largometrajes, la competencia iberoamericana de cortos, la competencia de cortometrajes UBA y distintas retrospectivas y homenajes. La programación incluye tres competencias: Competencia Internacional de largometrajes, Competencia Iberoamericana de cortometrajes y Competencia de cortometrajes UBA.

Sobre la participación de nuevos realizadores y el lugar que se le dará a los estudiantes y egresados de la universidad, Alfonsín contó: “El festival nace por esta necesidad de darle visibilidad y un nuevo espacio de representación y una ventana principalmente para los estudiantes y los nuevos realizadores, ya que entendemos que estamos en un contexto desfavorable para los países emergentes, donde la industria está en pleno proceso de transformación. Es necesario profundizar políticas que puedan dar continuidad, visibilidad, fomentar y dar oportunidades a nuevos realizadores que si siguieran solamente bajo las reglas del mercado a lo mejor quedarían afuera. Uno no puede adjudicar a un privado la obligación de contar algunas historias que pueden no ser rentables, eso tampoco debiera implicar la desaparición o la nula aparición de relatos que creemos imprescindibles para poder fomentar y cuidar nuestra cultura. Allí es donde debe aparecer el Estado y todas sus formas, entre ellas la universidad pública, para brindar nuevos espacios y herramientas con las cuales contar para la realización de sus proyectos”.

A 40 años de la recuperación de la democracia y siendo nieto del expresidente Raúl Alfonsín, Al Director General del FIC.UBA le genera mucho orgullo y una responsabilidad muy grande llevar adelante este festival. “Alfonsín era bastante cinéfilo y en algún momento hasta escribió un guión, que lo entregó a un productor de Canal 7 y se lo rechazaron. Le dijeron que era demasiado cinematográfico y el guión era para una telenovela. Creo que él dejó sembrada alguna raíz dentro mío que terminé siguiendo ese camino”, comentó y adelantó: “Estoy trabajando hace un tiempo con un equipo en una película de ficción, que ya tiene escrita una primera versión de guión. Si Dios quiere, el año que viene empezará el famoso proceso de búsqueda de financiamiento y el espacio de proyección. Vamos a abordar al Alfonsín previo a la presidencia, cómo se forma ese liderazgo, la construcción del hombre detrás del líder, del presidente, cómo se llegan a la génesis de las decisiones tan importantes que luego él toma en su gobierno que tienen que ver con el posicionamiento frente al Juicio a las Juntas”.

Este encuentro cinematográfico no será solo de proyecciones. Lucrecia MartelÁlex de la IglesiaSergei LoznitsaMariano Llinás y Enrique Piñeyro dictarán un seminario sobre Cine y Democracia con el fin de generar un espacio de debate y reflexión sobre el papel del cine en la consolidación de los valores democráticos en la sociedad.

Además, MartelSergei LoznitsaManuel Antín y De la Iglesia recibirán el Doctorado Honoris Causa de la Universidad de Buenos Aires. Este título honorífico es otorgado a personalidades que han realizado relevantes contribuciones en sus respectivos campos, reconoce la excelencia, la trayectoria, el impacto y el compromiso social y político. Se trata de la máxima distinción otorgada por la UBA. Cada uno de los homenajeados tendrá un foco especial donde se podrán disfrutar la mayoría de sus películas.

El documental The Natural History of Destruction, de Sergei Loznista, será la película de apertura. El film, hecho exclusivamente de material de archivo, examina la percepción del fenómeno de la destrucción masiva de la población civil alemana en la literatura europea de posguerra.

Por otra parte, Simone, la mujer del siglo, de Olivier Dahan, será la película de clausura del FIC.UBA. La biopic está protagonizada por Elsa Zylberstein, que se pondrá en la piel de la política Simone Veil, una figura clave en la lucha por los derechos de la mujer en Europa. También habrá una proyección especial de La Uruguaya, de Ana García Blaya, la película basada en la celebrada novela de Pedro Mairal y financiada vía crowdfunding a través de Orsai, la flamante productora del escritor Hernán Casciari; y habrá un homenaje a los 35 años del Festival “La mujer y el cine”, con la proyección de la película Ofrenda, un proyecto colaborativo entre numerosas directoras.

Las funciones serán con entrada gratuita, se obtendrán con media hora de anticipación a cada proyección de cada sede y podrán retirarse hasta 4 localidades por persona. Las sedes serán la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) (Pabellón 3 de Ciudad Universitaria), el Cine Cosmos UBA, las Salas 1 y 2 del Centro Cultural San Martín y el Cine Gaumont.

“Nosotros creíamos que la sede principal tenía que ser la FADU porque allí se cursa la carrera de Imagen y Sonido. Todo el equipo de producción del festival es de la FADU, entonces era natural que fuera así. Para el resto, fuimos armando un circuito que permitiera acceso fácil y transitable, pero además por ejemplo, el Cultural San Martín fue sede de la CONADEP, entonces simbólicamente representan muchas cosas y una de las salas se llama Manuel Antín”, comentó su director.

Fuente: de Noelia Gómez para Infobae.