Un viaje a la Riviera Maya es mucho más que hermosas playas de aguas turquesas y hoteles all inclusive. Ruinas arqueológicas, parques naturales, cultura e historia de la civilización maya, formaciones geológicas únicas como los cenotes, exquisita gastronomía y la atención de un pueblo tradicionalmente hospitalario le dan a este paisaje paradisíaco lo que necesita para ser uno de los destinos del Caribe más completos e interesantes para vacacionar.

En esta nota te invitamos a descubrir cuatro joyas de la Riviera Maya que, sin dudas, vale la pena conocer.

  • ISLA DE COZUMEL

Esta isla es reconocida a nivel mundial por la belleza de sus coloridos arrecifes de coral, el encanto de su mar azul turquesa y  sus playas de arenas blancas. Cuenta con más de diez sitios arqueológicos de la cultura maya precolombina. Aunque no todos están abiertos al público,  el más importante es el de San Gervasio, que es santuario de Ixtel, diosa de la fertilidad y el amor. Este lugar sagrado era una visita obligada para las mujeres mayas que, por lo menos una vez en su vida,  debían rendirle tributo.

Entre las atracciones de Cozumel se encuentra el maravilloso Parque Natural Chankanaab, declarado área protegida por su flora y fauna endémicas. Su laguna de agua salada y su parque botánico maravillan a grandes y chicos. Y, si lo tuyo son los deportes acuáticos, no podés dejar de explorar el mundo submarino de Cozumel a través del SNUBA (una especie de buceo en el que, en vez de llevar el tanque en tu espalda, se encuentra afuera del agua, conectado por una larga manguera) o del SeaTrek (lo mismo, pero en vez de respirar por la boca, como en el buceo, se te coloca un casco con oxígeno conectado al exterior).

  • CHICHÉN ITZÁ

Boca-del-pozo de los brujos-de-agua es el significado del nombre de una de las urbes más famosas y controvertidas del mundo maya que permanece de pie para asombro de todos y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNES
CO en 1988.

Se estima que Chichén Itzá se construyó alrededor de los años 435 y 455, y hacia fines del siglo X fue abandonada por razones que nunca fueron determinadas. Entre sus edificaciones más sobresalientes podrás admirar los templos de los Guerreros y de las Mil Columnas, la Plataforma de Venus, el Tzompantli, el Juego de Pelota, el observatorio El Caracol y la Iglesia. Y, por supuesto, el espectacular templo de Kukulcán, que es una pirámide de cuatro lados y de 30 metros de altura, coronada con un templo en la parte superior. Se cree que es la representación del calendario de los mayas y un monumento erigido en honor al dios del sol.

  • LOS CENOTES

Uno de los atractivos que distinguen a la Riviera Maya son los cenotes, cuyo nombre proviene del maya dzonot, que significa cavidad con agua. Los cenotes son formaciones únicas en el mundo: además de ser el recurso primordial para la obtención de agua fresca en la selva, constituían lugares sagrados para los mayas porque representaban la entrada al inframundo espiritual.

Grandes asentamientos mayas se construyeron en torno a estas cavidades. En el fondo de los cenotes se encontró abundante cantidad de ofrendas y joyería que, quizás, fueron arrojadas a las profundidades después de sacrificios humanos. También se hallaron restos de cerámica y de utensilios destinados a ceremonias religiosas.

En la península de Yucatán existen más de 3 mil cenotes distribuidos en todo el territorio. Los más conocidos son el Chac Mool (a 20 minutos de Playa del Carmen, pasando el puente de Puerto Aventuras), el Cenote Sagrado a cielo abierto de Chichén Itzá y el Gran Cenote de Tulum. Las aguas transparentes hacen de los cenotes lugares ideales para actividades recreativas como nadar o bucear.

  • TULUM

En este lugar se conjugan cultura, historia y una de las mejores playas de México. Se trata de la única zona arqueológica que se asienta a la orilla del mar y es el sitio más fotogénico de la región (quizás, de todo el país).

Tulum fue una fortaleza maya que vivió sus momentos de gloria al final del período clásico (cerca del año 1000 d.C.). La más icónica de sus estructuras, El Castillo, se encuentra al borde de un acantilado desde donde se puede apreciar el agua turquesa del mar.

En el extremo sur del sitio arqueológico se encuentra una de las playas más apacibles de la Riviera. Aquí no hay hoteles de 500 habitaciones ni una gran infraestructura. Por el contrario, podés alquilar cabañas lujosas o rústicas, dependiendo de tus gustos y tu presupuesto. Este pueblo también es óptimo para explorar la región sur de la Riviera Maya, ya que muy cerca se encuentra la zona arqueológica de Cobá.

 

Interturis ,   la empresa de Viajes y Turismo del Grupo  Osde, te invita a descubrir estas cuatro joyas que encontrarás en la Riviera Maya. ¡Un auténtico tesoro natural y cultural!

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